“MUJER AZUL” del escritor Eli Caicedo, poema con un halo de misterio
La voz enrojecida del crepúsculo
Descubrió tu presencia
Más allá de los laberintos de la tarde,
En la sonrisa, morena e infinita,
Del rostro insomne de la noche,
Mujer de magia y de misterio.
El hondo crepitar
De la lava ardiente de tus ojos
Enmudeció el canto de los búhos
Y adornó de mariposas y de estrellas
La negra cabellera de la luna.
Mujer azul,
Todos los amaneceres
Tienen los sabores de la noche
Y los aromas del café
Que usaron los dioses
En la fantasía de tu piel.
Mujer azul,
De misterio y fantasía;
Mujer azul
Con sabor de noche
Y aroma de café.