Por. Elí Caicedo
BAJO LA LLOVIZNA Y LA NEBLINA.
En esta mañana,
Escondida
Entre algodones de neblina
Y escarchas de llovizna,
Un brisa gélida
Corre por el parque
Entre el cuerpo de las flores
Y la cabellera de los árboles,
Juega y estremece
La húmeda hojarasca
Ante el silencio
Aterido de las aves;
Luego, entre danzas y cabriolas,
Golpea y alborota
El viejo libro de la estatua,
Arrancando los escritos de sus hojas
Y cubriendo, con su voz y poesía,
La fría soledad del parque
Y el silencio de las calles y las casas,
Bajo el asombro y el aplauso
De la llovizna y la neblina.